¿Los Estados Unidos son más racistas que el Perú? El caso de Skunk Anansie

Hernán Migoya
Escritor y guionista español. Ya está a la venta su nueva novela, "La flor de la limeña" (Planeta Perú).
Fuente: www.fusion.net
Una de las cosas que más atónito me dejan en el Perú es cómo muchos de sus ciudadanos con tribuna pública se piensan que todos los males existen únicamente en su país.
¿La violencia en las calles? Una pareja venezolana me confesó hace poco que lo que más le gustaba de Lima era “su seguridad”.
¿Corrupción? Hay corrupción en todo el mundo, hasta límites increíbles.
¿Telebasura? El país más poderoso del mundo, Estados Unidos, es su inventor: la única diferencia con el Perú es que los EE.UU. la consideran cultura. Los cómics de superhéroes o la lucha libre gringa serían considerados bazofia más perniciosa que «Esto es guerra» si hubieran nacido en el Perú o en España.
¿Racismo? Sí, vivimos desbordados por el racismo y por un clasismo repulsivo en este país. Pero la gente se habla. He estado en países sudamericanos donde los miembros de diferentes clases ni siquiera se dirigen la palabra… ¡ni se miran!
Y el racismo también existe en todas partes: Estados Unidos es un país muy rico, pero tremendamente racista.

Fuente: www.theguardian.com
La última prueba la ha aportado Skin, la hermosa cantante del grupo británico Skunk Anansie. De los 90s, creo que mi grupo favorito sigue siendo Suede, pero si debo elegir una banda de esa década que me hiciera disfrutar en directo, sin duda Skunk Anansie es la voz. ¡He estado en tres conciertos suyos y siempre salí de ellos queriendo ser tan guapa, talentosa y energética como Skin! Un ejemplo con su increíble temazo Charlie Big Potato:
Pues bien, en una entrevista reciente con motivo de la primera visita de SA a los USA en quince años, la cantante londinense de origen jamaicano (¡quién diría que está a punto de cumplir los 50!), que por fortuna siempre ha sido una bocazas y no se calla sus contundentes opiniones sociales y políticas, se despacha a gusto con el racismo estadounidense: en esta entrevista para la revista fusion.net, y tras aclarar que Inglaterra también tiene sus rezagos racistas, declara que Estados Unidos es el único lugar en que ha estado donde se siente “realmente negra”… pero no para bien: “En los EE.UU. siento que la gente me ve primero como negra. Y entonces abro mi boca y me dicen: “Oh, pero si eres inglesa, así que no eres uno de nuestros negros, de esos a los que podemos maltratar”. Es muy duro aquí en los Estados Unidos, hombre, es duro de veras. Realmente uno siente su raza en este país. Uno lo siente de un modo como no lo he sentido nunca en Inglaterra”.

El look de Skin ya lo querría yo cuando tengo que hacer una reclamación en el banco… (Fuente: www.nolook.ru)
Sobre Donald Trump no tiene una opinión mejor: “Alguien debe pararle. No pueden permitir que este hombre sea su próximo presidente”. Ella tiene buenos motivos para despreciar a un parafascista como Trump: “Soy mujer, y también negra. Soy también gay, bisexual. Tengo una sexualidad fluida. Y además provengo de un contexto de mucha pobreza: estas cuatro características han forjado mi carácter y mi identidad”.
En otra entrevista para W Magazine, Skin ahonda en el problema de los estereotipos raciales: “Creo que la comunidad negra sufre estereotipos en un montón de cosas distintas. En Estados Unidos, tienen el R&B, el rap y el hip-hop, por eso me encanta cómo este festival (el Afropunk) promueve a gente como nosotros, que no hacemos nada de eso. Si eres blanco y haces algo que se percibe como negro, siempre se elogia. Pero lo contrario no siempre se juzga tan positivamente. Cuando sale gente negra haciendo rock, no se estima demasiado”.

Fuente: www.blackwomeninrock.com
Soy devoto de Skin y admiro su fuerza y su sentido de la libertad. Ojalá siga con tanta determinación como hasta ahora al frente de su banda, aunque lo esté pasando mal por su reciente divorcio con su esposa. Mientras esperamos que nos visite para ver qué opina del racismo limeño, si le parece superior o más nefasto que el gringo, disfrutemos con uno de sus últimos videoclips, donde hace trizas el vestido con que se casó:
Más procrastinación
