A favor de la telebasura (y contra el autoritarismo en la cultura)

La Historia se repite: El Quijote también fue considerado irremisiblemente perjudicial para su nación. En el siglo XVII, el ensayista inglés Sir William Temple, “llega a afirmar que Cervantes y su obra provoca la decadencia española pues entre otras muchas cosas, rebaja el principio de honor, de moral y de valor en la tradición española”.  Es más, según él podría ser la causa de la caída del imperio español.

Es decir: ¡El Quijote también fue juzgado por algunos en su momento como pura cultura basura nociva para los valores y fundamentos de la patria española! Lógico, dado que está repleto de escatología y vulgaridades y se ríe de todo y todos. Y eso no la hace menos obra maestra de la literatura universal.

Toda cultura establecida empezó siendo cultura basura

Pues lo mismo están haciendo ahora los promotores de esta marcha contra la cultura basura: consideran cultura solamente aquello que YA está establecido; considerando cultura basura (y por tanto indeseable) todo lo que nace en el proceso, sobre todo si es peruano. Y encima confunden la telebasura con la corrupción en los medios. Vean su festiva rueda de prensa:

Estoy de acuerdo con la próxima Marcha en contra de la TV basura en su exigencia de que se cumpla el horario de protección al menor y cierto código de comportamiento, así como que, sobre todo, se sanee la producción televisiva alejándola de corruptelas, de compras de espacios con dinero negro y de manipulaciones políticas. Pero el fondo que motiva la marcha me aterra: pues debajo de esa fina capa de “responsabilidad ciudadana” se adivina un afán moralista que sólo  pretende, cada  vez parece más claro, suprimir todo aquello que contradiga un modelo tremendamente puritano y retrógrada de la cultura. Palabras como “moral”, “buenas costumbres”, “contenidos nocivos y perniciosos” me hacen temblar… Son excusas aceptadas socialmente para lo que siempre saben hacer las almas autoritarias: prohibir.

Una revista como Charlie Hebdo jamás podría existir en el Perú si hacemos caso a la mentalidad de muchos de los que marcharán contra la cultura basura: sería considerada el novamás del mal gusto, la chabacanería, la ofensa a los “valores” tradicionales, familiares, religiosos… en suma, un atentado contra el orden y la moral. Que es lo que tiene que ser la cultura para que sea cultura viva, curiosamente.

Es posible que la gente que marche convencida contra la TV basura es la que impida que en el Perú exista nunca una obra autóctona con las características subversivas y artísticamente estimulantes de Charlie Hebdo, Los Simpson, Spartacus, Nynphomaniac, American Psycho, etc. etc.

Girls just want to have fun

Niños, se acabó la diversión… (Reportaje para Hildebrandt en sus trece)

A nivel personal, me da miedo dejar en esas manos la regulación de lo que podemos o no disfrutar en la TV… un comité que ve mal que los niños elijan por sí mismos lo que quieren ver (como si no lo hicieran en el resto del mundo y por Internet, cuando hoy la red ejerce mucha mayor influencia y ofrece contenidos mucho más agresivos que la TV), pero al que no le parece mal que los críos acudan a la Marcha… aunque seguramente esto último no lo hayan decidido por ellos mismos, los pobres chiquillos.

Por su parte, la psicóloga del vídeo no tiene ni puñetera idea de lo que habla: la violencia en los medios procede en su mayor parte de la ficción estadounidense. Por suerte la cortan pronto (aparece en el minuto 8:08, es un momento muy divertido).

Con la única persona que sí estoy de acuerdo en el vídeo es con el chico que habla al final, César Osorio Lara: en efecto, hay que intentar evitar que nuestros hijos quieran parecerse solamente a un “rubiecito” de la TV o a una siliconada. Ahí sí entran los padres en juego. Pero eso se consigue dando más opciones a los niños: promoviendo aún más su fantasía, no suprimiéndola. Supongo que César, como músico, lo sabe bien. Lo que no entiendo es qué hace sentado al lado de algunas personas que cincuenta años atrás lo hubiesen acusado de satanista sólo por ser rockero.

En general, el tono de esa rueda de prensa, de esos ciudadanos indignados, es EXACTAMENTE EL MISMO que el de los comités de ciudadanos cucufatos que en los años 50 querían prohibir en Estados Unidos las actuaciones televisivas de un jovencísimo Elvis Presley por sacudir lascivamente sus caderas y moverse de forma libidinosa y “perniciosa” para las jovencitas gringas. El fondo de la cuestión sigue siendo el mismo: gente amargada intentando amargarnos a los demás.

Para esa psicóloga de la rueda de prensa, la TV promueve la delincuencia juvenil como para este “ciudadano ejemplar” lo hacía Elvis, llevándole a querer prohibir los conciertos de rock’n’roll:

Gracioso que miles de jóvenes supuestamente progresistas desfilen bajo la misma bandera que defiende el Poder: la del control autoritario de esos mismos jóvenes progresistas y sus “gustos” transgresores y decadentes.

El Isaac Humala de los youtubers

Pero más malintencionado (o más torpe) es el youtuber Curwen en su reaccionario vídeo:

Otro tipo al que le gana el complejo de inferioridad a la hora de hablar de los Estados Unidos como panacea de la libertad y la modernidad. ¿Acaso Estados Unidos no ha sido uno de los países más racistas del mundo? Y más importante aún: ¿Acaso no han sido los inventores y mayores exportadores de la telebasura? Por nuestras mentes colonizadas, tendemos a pensar que la telebasura procedente de allí, por el hecho de consumirse en todo el mundo, es cultura de cuna noble, aceptada sin cuestionamientos. Pues bien, si fuese peruana, el 90% de la cultura basura USA sería cuestionada para ser prohibida. Es más: si fuese peruana, el 90% de la cultura estadounidense se consideraría cultura basura.
Si esos programas se hacen, es porque TIENEN ÉXITO. Porque al pueblo le encanta ese tipo de programas. ¿Por qué siempre sale un listo creyendo que es la voz de la mayoría? La mayoría está deseando ver COMBATE y ESTO ES GUERRA. Y de entre los que se oponen a la cultura basura, MUCHOS lo hacen por las razones equivocadas: por intolerancia, por pacatería, por sentirse superiores a los demás y por un concepto totalmente erróneo de lo que es la cultura.

Y, LO QUE ES MÁS IRÓNICO DE TODO: POR INCULTURA.

Cuando pone como ejemplo Trampolín a la fama, Curwen confunde la idiosincrasia de una época con los ingredientes de ese programa. Casi toda la cultura que pertenece al pasado, sea basura o no, nos puede chocar hoy por diferencias de moral, costumbres, ideales, comportamientos. Achacarlo todo a la maldad de un show televisivo, extrapolándolo de su contexto moral e histórico, es de demagogos en el mejor de los casos; en el peor, de tontos.

“Ver televisión basura te causa problemas mentales”, dice Curwen. Ésa es exactamente la misma teoría que hace ¡sesenta años! inventó el psiquiatra Fredric Wertham en su libro La seducción del inocente, acusando a los comics estadounidenses (entre ellos, los de superhéroes) de ser una mala influencia para los niños, una forma de cultura basura que llevaba a los jóvenes (¡otra vez, qué pesados!) hacia la delincuencia juvenilhttp://www.psu.edu/dept/inart10_110/inart10/cmbk4cca.html.

Por último: ¿por qué las series de ficción propia también son telebasura? ¿Porque sí? ¿Porque en el Perú no se puede hacer cultura popular sin caer en lo mediocre y lo cochino? ¿Porque si son peruanas ya tienen que ser malas por fuerza? ¿Quién ha establecido ese arbitrario y ridículo dictamen?

Cuando los cómics eran considerados cultura basura… Parodia de la ola de censura que desató el libro de Wertham en los años 50.

¿Stan Lee & Jack Kirby son los Fujimori & Montesinos de Estados Unidos?

En resumen: toda la teoría de Curwen (achacando el mal de la cultura basura EXCLUSIVAMENTE  a Vladimiro Montesinos, cuando la cultura basura existe en TODO EL MUNDO) se podría aplicar a los superhéroes Marvel. Bien mirado, las historietas y películas de superhéroes son una intromisión brutal en la configuración de valores y convicciones de los niños del planeta entero, también de los niños peruanos. Podría aducirse que todo responde a un plan maquiavélico del Fujimori estadounidense, Stan Lee, quien a través de su Montesinos particular en la sombra, Jack Kirbyhttp://www.tcj.com/jack-kirby-interview/, creó una serie de personajes “altamente adictivos” (Curwen usa esta frase como si fuese intrínsicamente malévola): los superhéroes serían los “cómicos ambulantes” que enroló Montesinos para someter la voluntad del manipulado pueblo.

Stan Lee enrolando cómicos ambulantes para su propia telebasura. (comicbookresources.com)

Prohibamos los superhéroes, por favor. ¿Alguien duda de que si fuesen un concepto creado en el Perú no estarían ya prohibidos? Disfraces sexys, violencia exacerbada, argumentos folletinescos sin fin, romances eternos no consagrados con el matrimonio… uf, eso atenta contra todo lo sagrado.

¿Y qué es lo más gracioso de todo? Que el mozalbete promueve su Caza de Brujas envolviéndola en aquello mismo que critica: o qué otra cosa si no es ese gracioso prólogo de ficción-basura que precede su fascistoide arenga. Supongo que el pobre ya tiene la cabeza destrozada de consumir tanta cultura basura.

Es difícil que hoy aparezcan señores serios en los medios estadounidenses intentando prohibir Jershey Shore o Big Brother (franquicia universal de concurso-bazofia creada por un holandés, por cierto), programas que si fuesen peruanos estarían también en el punto de mira de la Marcha. En realidad seguro que sí hay yanquis que quieren prohibir esos shows, pero se les identifica como lo que son: reaccionarios, autoritarios y fascistas en potencia.

¿Por qué no prohibimos también Jershey Shore…

…y sus estúpidos muñequitos?

La cultura del entretenimiento es válida per se

Muchos de los medios y obras que ahora consideramos cultura, en su momento también fue considerada basura perniciosa para las masas: desde las canciones de Abba a las historietas, desde las novelas policíacas de Dashiell Hammett a las películas de Hitchcock.

¡La cultura del entretenimiento es un invento casi 100% estadounidense! No hay nada de malo ni de pecaminoso en que la cultura sea entretenida, al contrario, es un valor añadido: casi el único valor que debería ser obligatorio.

La estúpida noción de que la cultura debe ser aburrida, solemne, adoctrinadora e “inocua” para las mentes de los consumidores proviene de los segmentos más fanáticos y conservadores de la sociedad, LOS QUE EN EL FONDO CONSIDERAN LA CULTURA VIVA COMO UNA AMENAZA CONTRA LA SOCIEDAD. Y quieren la cultura muerta, ésa que por desgracia algunos todavía creen que debe impartirse en colegios, institutos, iglesias y básicamente tribunas por parte de oxidados señores en ternos apolillados y en tonos ampulosos, y que mal entendida sólo adoctrina y castra al individuo para mantenerlo sumiso y connivente.

A ese segmento opinativo pertenecen estos comentarios rescatados (y penosamente redactados, por cierto, lo cual no dice mucho a favor de su causa) en artículos de Útero, apoyando la Marcha contra la TV Basura:

“que importa que el presidente lo quiera, nosotros también no lo deseamos???, marchemos hasta que pongan documentales envés de tv basura.”

“Creen que la gente es demasiado estúpida para que con este estúpido post la población que no está conforme con este gobierno relacione a Humala con una protesta contra la Televisión basura, llena de apología al desorden alimenticio, homosexualidad, inmoralidad, falta de valores, ética, etc., etc.?”

“a mi me da pena realmente lo putas q se vuelven las niñas gracias a que son educadas por la televisión, mis tías, tíos y demás personas de mi entorno han hablado de esos programas, que es gracioso verlos (esto es guerra/combate), yo les miro y digo ah si si xk de viejas ya no tienen salvación como por alli dijeron si les quitas su droga van a pitear pero hagamoslo x nuestros hijos saquemos a toda esa mierda de la televisión o almenos intentemos de salvar a las futuras generaciones, la respuesta más viable es apagar la tele o consumir solo programas culturales pero eso es una maldita quimera lwl,”

Pues sí, una de las virtudes ciertamente más apreciadas de la cultura en los ámbitos cultivados y sociedades desarrolladas precisamente es que amenace el orden establecido… Por eso unas mentes primitivas y sin sentido del humor (el sentido del humor suele ser la garantía de inteligencia) mataron a los artistas de Charlie Hebdo.

Y por eso muchos de los que marcharán contra la telebasura tienen el mismo concepto de la cultura que quienes están en el poder.

Me hace mucha gracia cuando estos anti-contestatarios oponen a la telebasura, como opción, “programas culturales” o “documentales”, o sea, evangelismo cultural del establishment elitista, cultura establecida o en todo caso inapropiada para gente joven o de los extractos sociales a los que va dirigida mayoritariamente la telebasura. Son como los clasistas que decían en España que un libro siempre es mejor que un cómic.

¡O esos profesores que nos hacían leer El Quijote a los quince años, haciéndonos aborrecerlo casi de por vida!

Insisto: otra cosa son los programas pagados con dinero negro por personalidades corruptas para atontar a las masas. Toda irregularidad en el juego de oferta de producción/audiencia debe ser debidamente saneada y regulada. Para mí eso no es telebasura, es televisión corrupta. O por decirlo de otro modo: sería en todo caso tan TV basura como ocho horas de discurso televisado de un dictador.

Dentro de mil años, cuando se organice una exposición sobre cultura peruana de nuestros días, dudo que se expongan los libros de Vargas Llosa: se hará una muestra de las maravillosas portadas de los diarios chicha, y tendrá tanto éxito entre el público extranjero como cuando los turistas visitan una exposición de tumis (cuchillos rituales de sacrificios humanos, o sea, que servían para matar personas…) o de los huacos porno (que hoy día serían considerados ofensivos y causantes de actos pecaminosos en la juventud… pero se ven con benevolencia por su valor histórico). En mil años a nadie le importará cómo nacieron los diarios chicha, como a nadie le importa hoy a quiénes se mató con los tumis o qué coño hacían con los huacos arrechos.

La cultura no se impone: la cultura ES, nos guste a todos o no. La llamemos basura o excelsa.

Porno duro… ¿Y esto enseñan en las escuelas? Pobres niños.

PD. Si queremos una televisión diferente, utilicemos esta marcha para que la televisión pública elabore esa oferta más “formativa” que se echa en falta y que, ya solamente como complemento, está más que de sobras justificada porque amplía el parámetro de opciones del ciudadano consumidor. O contra la corrupción en la tele. A esa marcha yo acudiré el primero.

De hecho voy a acudir a esta Marcha también y en primera fila, disfrazado de concursante de Esto es guerra y abrazándome a todos.